Las tendencias gastronómicas y culinarias son tan numerosas como relevantes en la cultura actual. La cocina es el centro de todo y su papel y usos son múltiples. Existe tanto la cocina casera tradicional, como la tendencia de cocina molecular, con técnicas de laboratorio La comida rápida y los platos elaborados. También existe un consumo de comida para llevar y de entrega a domicilio como nunca antes había existido. Las cocinas deben estar diseñadas para ser multifuncionales. Es un teatro de cocina al estilo de los chefs: preparar algo rápido, entretener a los invitados y conseguir platos de comida para llevar. Al mismo tiempo, también es el lugar donde se pasa tiempo con los niños, se pagan facturas o se descansa después de un largo día.

Se podría entontes considerar el pasar de los triángulos estrictos a las zonas. Una cocina, social y abierta, a día de hoy, puede diseñarse en torno a zonas independientes. Una para cocinar, una para la preparación, otra para emplatar, otra para leer libros de cocina, otra para preparar esa nueva bebida, etc. Diseñar por zonas significa que más personas pueden unirse a la diversión sin estorbar a los demás. Las zonas que no están en uso en ese momento pueden utilizarse para esas personas que no participan en la actividad culinaria, pero que siguen en la conversación. Una cocina diseñada por zonas y centrada en las personas, está a la orden del día.