Todo listo en segundos gracias a tu plancha de vapor vertical AEG. Fuera arrugas y malos olores casi sin esfuerzo aplicando vapor a altas temperaturas.
La tecnología ha conseguido que una de las tareas del hogar más tediosas se convierta en algo llevadero. Gracias a las planchas de vapor vertical es posible eliminar las arrugas de la ropa de un modo más rápido y sencillo.
Una plancha vertical es un accesorio eléctrico que permite alisar los tejidos mediante el empleo de vapor. La principal diferencia con una plancha de vapor convencional es que no hace falta que la superficie de la plancha entre en contacto con la ropa para quitarle las arrugas.
Como su nombre indica, el proceso de planchado se realiza en vertical, con la prenda colgada de una percha y deslizando la plancha de arriba abajo delante de esta sin llegar a tocarla. Es un sistema versátil que permite trabajar con todo tipo de prendas, desde las de gran tamaño, como faldas y vestidos largos, hasta toallas o camisas delicadas. El proceso es ágil y no requiere de demasiado espacio, ya que se puede prescindir de la tabla de planchar.
Otra ventaja destacable del planchador vertical es que su uso no resulta tan agotador. Estos aparatos se componen de un mango ligero y ergonómico más cómodo de manejar que una plancha tradicional. El cabezal incorpora un depósito de agua desmontable y de gran capacidad que puede generar vapor de hasta 22 g/min.
La suela del cabezal está provista de orificios que se encargan de la difusión del vapor de manera continua y homogénea hasta obtener los resultados deseados. Con una potencia media de 1.400 w, el calentamiento del agua es rápido y la presión del vapor muy eficaz para acabar incluso con las arrugas más rebeldes.
Las planchas verticales de AEG tienen potencia suficiente para enfrentarse a los tejidos más gruesos, como la tela vaquera, y para tratar con delicadeza las telas más finas como la muselina. Pero si las arrugas persisten, siempre es posible recurrir a soluciones más focalizadas. El cabezal lleva una suela Glissium™ que se puede deslizar con suavidad sobre el tejido para un tratamiento de precisión que garantice un acabado perfecto.